Algunos las aman con locura, otros no quieren ni oír hablar de ellas. Las tarjetas de crédito pueden ser de gran ayuda si se usan correctamente, pero pueden hacerte la vida imposible entrando en un bucle de deuda si no las usas correctamente.
Las tarjetas de crédito son sin duda una gran alternativa para organizar nuestras finanzas, obtener beneficios o financiar compras importantes pero al mismo tiempo son una herramienta de doble filo, que si no sabemos utilizarlas de manera correcta, nos pueden llevar al desastre financiero más absoluto y sumergirnos en deudas interminables.
En el siguiente vídeo te vamos a enseñar cómo utilizar las tarjetas de crédito correctamente y nunca pagar intereses de más!
Empezamos definiendo qué son las tarjetas de crédito!
Qué son las tarjetas de crédito
Las tarjetas de crédito son una de las herramientas financieras más utilizadas en el mundo entero.
Estas no son más que una tarjeta que nos entregan los bancos o entidades financieras para que podamos realizar compras con “dinero prestado” ya que podremos comprar productos o servicios a través de cuotas o pagos diferidos.
Las tarjetas de crédito son uno de los productos financieros más lucrativos para las entidades financieras, así que probablemente sea porque el banco está ganando dinero a tu costa. Pero no culpemos al banco, porque la responsabilidad es nuestra de hacer un buen uso y que su arma de doble filo no se vuelva en nuestra contra.
8 Consejos de cómo hay que usar las tarjetas de crédito
1) Elige la tarjeta de crédito que a tí más te conviene
De entre todas las opciones que tienes para adquirir una tarjeta de este tipo, piensa cuál es la mejor para tí y para el uso que le vas a dar. Por ejemplo, si tu objetivo es ganar millas para viajes gratis o si tu objetivo es simplemente mejorar tu historial crediticio, la tarjeta que elijas va a ser diferente.
Cuando hagas la comparativa, ten en cuenta el costo anual total (CAT) de la tarjeta, es decir cuánto nos va a costar teniendo en cuenta todos los gastos asociados a ella. Mira con detenimiento los siguientes parámetros:
- Tasa de interés
- Las comisiones
- Anualidad
- Beneficios
Una vez hayamos elegido nuestra tarjeta de crédito, tendremos que entender bien su funcionamiento y por ejemplo, en qué casos se nos aplica comisión o para qué ocasiones usar la tarjeta de crédito.
2) No uses la tarjeta de crédito como dinero extra
Nunca utilices las tarjetas de crédito para comprar cosas que no puedes pagar! Cuando haces uso de la tarjeta de crédito, estás “tomando dinero prestado”. Este dinero prestado no es gratis y te cuesta unos intereses si es que no pagas de forma puntual. Es por eso que una tarjeta de crédito no es para comprar cosas que no te puedes permitir con tu sueldo. Si quieres permitirte un capricho, simplemente ahorra y cómpratelo con dinero ahorrado.
3) No pagues sólo el mínimo
El pago mínimo es la cantidad más pequeña que puedes pagarle al banco para saldar tu deuda de la tarjeta de crédito. Con esto, el banco te no considera “moroso” ni se te aplica una “tasa de morosidad”. Sin embargo, si sólo pagamos el mínimo, apenas estamos pagando nuestra deuda, prácticamente sólo estamos pagando los intereses.
Pagando el mínimo no estamos saldando la deuda al completo, al contrario, lo que estamos haciendo es aplazar el pago de la deuda, por lo que la deuda sigue creciendo.
La deuda que tenemos entonces es tu dinero prestado más los intereses que el banco te cobra. Si únicamente pagamos el mínimo, es decir, los intereses, aún nos quedará el restante que es el dinero prestado. Si hacemos esto cada vez, nuestra deuda total aumentará incontrolablemente.
Pagar el mínimo es una mala estrategia y tenderíamos a creer que no estamos endeudados cuando en realidad sí que lo estaríamos.
Así que siempre abona el 100% del saldo pendiente de forma puntual y evita intereses extra. No pagues sólo el mínimo, sino se te van acumulando los intereses y al final, sales perdiendo!
4) Aprovéchate de los meses sin intereses
Muchas tarjetas de crédito y casas comerciales ofrecen los meses sin intereses. Esto significa que podremos pagar en cuotas o plazos pero sin pagar intereses!
Esta es una de las mejores alternativas para usar nuestras tarjetas de crédito, ya que podremos tener el beneficio de pagar en plazos pero no pagar de más.
Generalmente estos meses sin intereses suelen ser una cantidad determinada que pueden rondar de los 3 a los 12 meses. Pero obviamente es muy importante pagar a tiempo nuestras cuotas, ya que de lo contrario SI terminaremos pagando los intereses.
5) Utiliza los beneficios y descuentos
Uno de los grandes atractivos de estos plásticos son sus beneficios. Así que por supuesto, hay que usarlos bien!
- Acumula millas para viajar: Existen tarjetas de crédito afiliadas a aerolíneas, donde cada vez que usas la tarjeta estarás acumulando millas. Con las millas puedes recibir descuentos en viajes o billetes de avión para tu próximo viaje.
- Aumenta tu historial crediticio: si el día de mañana quieres pedir un crédito para comprarte una casa, el historial crediticio va a decidir si te lo dan o no y bajo qué condiciones. Por supuesto es muy importante haber hecho un buen uso de la tarjeta aquí. Por ejemplo, si quieres pedir una hipoteca tu historial crediticio te va a ayudar a obtener mejores condiciones.
6) No tengas más de 2 tarjetas de crédito
Cancela las tarjetas de crédito que no uses. Si tienes múltiples tarjetas de crédito va a ser muy difícil llevar la cuenta de todas. Idealmente no tengas varias, hazlo simple y ten una sola que uses con regularidad.
Ten máximo dos tarjetas!
7) Jamás retires dinero con la tarjeta de crédito
Cuando tenemos una tarjeta de crédito en nuestras manos (sobre todo si es la primera), caemos en la trampa de creer que utilizar el plástico para disponer de efectivo es lo mismo que realizar una compra pero esto no es así!
Sacar dinero en efectivo de una tarjeta de crédito es como “pedirle un préstamo” al banco y por ello, las instituciones te cobrarán por adelantado una comisión por retiro de efectivo, que en promedio va del 4% al 10% de la cantidad retirada. Esto además de los intereses que ese adelanto va a generar.
Por esto, si es que quieres usar una tarjeta de crédito, te recomendamos sólo hacerlo para realizar compras y NUNCA para retirar dinero en efectivo.
8) No la uses para pagar en cuotas
Generalmente se comete el error de usar la tarjeta de crédito para pagar cosas cotidianas, como el supermercado o salir a comer de restaurante, y se usa la misma la tarjeta para pagar otros gastos que se pagan a plazos, como un coche o un viaje. Cuando pagamos a plazos el interés suele ser más alto, y el problema es que para calcular el interés de la tarjeta cuando hay compras a plazos, se coge el promedio de todas las compras de la tarjeta, incluyendo esas que no sean a plazos, con lo que al final estamos pagando más por esa compra del súper.
Si tienes tentación de usar la tarjeta “que no debes” a cada rato para hacer otras compras cotidianas, simplemente déjala en casa! Y llévala contigo sólo cuando vayas a hacer una compra grande como muebles o un viaje, es decir, algo fuera de lo normal y donde sepas que vas a tener que pagar a plazos.
Conclusión
Las tarjetas de crédito son probablemente uno de los instrumentos financieros más populares y de más fácil acceso. Y si bien pueden ayudarnos a comprar cosas por adelantado u organizar mejor nuestras finanzas personales, es importante que aprendamos a usarlas correctamente.
Lo más importante de todo es que logres evitar pagar intereses a toda costa y como vimos, es posible. Si es que usas los meses sin intereses y pagas al día tus cuotas, podrás disfrutar de los beneficios de una tarjeta de crédito pero sin pagar de más por ello.